27 de Diciembre, 2024 - Permanece
Permanece
27 de Diciembre, 2024
Juan 15:4 “Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el sarmiento no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.”
Permanecer en Él es estar vitalmente unido a Él. Estamos conectados. Es como cuando ves un remolque en la carretera; el tractor, el motor, y el volante están en el frente y el remolque con la carga está en la parte de atrás. Tu nunca has visto un remolque sin un tractor, sin volante, conductor ni motor. Sin embargo, muchas personas que son cristianas, en su camino al Cielo cuando mueren, están viviendo una vida de remolque yendo por la carretera sin rumbo. Eso es peligroso en lo natural y aún más peligroso en el reino del espíritu. Debemos permanecer en Él.
¿Cómo podemos saber si estamos permaneciendo en El? 1 Juan 2:6 dice que si permanecemos en Él, debemos andar como Él anduvo. Y no es difícil ver quién realmente permanece en Él. En Juan 15:7, Jesús dijo que si mis palabras permanecen en ustedes, pueden pedir lo que quieran. Tu puedes saber si alguien está permaneciendo en Él por su nivel de Palabra, por lo que está pidiendo cuando ora. Como un creyente nacido de nuevo, Él vive en nosotros. Él nos hizo nuevas creaciones, nuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo, pero ¿estamos permaneciendo en Él? Es identificable.
Una manera de saber si estamos permaneciendo en Él es que estamos produciendo en nuestras vidas. Estamos produciendo fruto. ¿Qué tipo de fruto? Esto no está hablando directamente del fruto del espíritu, el cual deberíamos estar creciendo cada día. En el contexto, está hablando de llevar el fruto de la oración contestada (Versos 7-9). También, el fruto que Jesus produjo en la Tierra debe ser esperado por cada creyente que verdaderamente permanece en Él. Si plantaras una semilla de manzana, no esperaría naranjas, ¿verdad? Ya que estamos morando en Él y Su Palabra está morando en nosotros, debemos esperar lo que Él nos dijo en Juan 14:12, que las obras o el fruto de Su ministerio es ir y hacer lo mismo con aún mayor fruto. ¡Sé que parece demasiado! ¿Cómo puede una pequeña semilla de manzana ser responsable de un árbol que un día produce cientos de manzanas? Todo lo que puedo decir es que así es. Y por cierto, esas manzanas tienen semillas dentro para que el ciclo continúe. Nosotros también somos Su semilla, ¡y debemos mantener el fruto!
La única manera de producir el fruto que se supone que debemos producir es permaneciendo en Él. Si eres una rama que se desconecta de la vid, dejarás de producir fruto. Necesitamos pasar nuestra vida asegurándonos de que estamos conectados al dador de vida, la vid. Cuando lo hagamos, produciremos mucho fruto, el mismo tipo de fruto que produjo Jesús. ¡Permanezcan en la vid!
Pr. Mark Garver