17 de Octubre, 2023 - Nuevas vasijas

Nuevas Vasijas

17 de Octubre, 2023

Jeremías 18:4 (AMPC) "Y la vasija que estaba haciendo de barro se echó a perder en la mano del alfarero; así que la repuso, volviéndola a trabajar en otra vasija según le pareció bien al alfarero hacerla."

Creo que la primera aplicación es que, gracias a Dios, podemos nacer de nuevo. Podemos ser hechos de nuevo por el alfarero (Padre Celestial). Se nos puede dar un nuevo corazón, que por cierto, es lo que llaman el interior de una vasija de barro (el corazón de la vasija). Cuando le pedimos al Señor que nos perdone de nuestros pecados, y recibimos a Jesús como Salvador y lo hacemos Señor de nuestra vida, es entonces cuando hemos sido rehechos por el alfarero. También creo que esto tiene que ver con nuestras vidas. Incluso si las cosas no salieron bien porque no obedecimos, y nuestra vida (nuestra vasija de barro) no se veía tan bien, todavía podemos volver a la rueda del alfarero, para que Él pueda rehacernos. Cuando somos rehechos por el alfarero, él hace cada vasija para un propósito, un uso definido. Efesios 2:10 dice que el Señor nos ha diseñado a cada uno de nosotros para buenas obras, o para nuestro propósito en la vida. No puedes encontrar tu propósito en la vida sin encontrar el propósito de Dios para tu vida.

Creo que cuanto antes en la vida la gente abrace aquello para lo que el Creador los creó, menos frustrados se sentirán. Tantos creyentes están luchando, y una de esas razones es porque no han encontrado su lugar en el Reino de Dios. No estoy hablando de predicar. Estoy hablando de quien Dios te hizo ser. Me gusta mucho lo que Dios le dijo a Israel sobre el rey Ciro y se aplica a todos nosotros. Isaías 45:9 (NTV) dice: "Qué dolor les espera a los que discuten con su Creador. ¿Discute la vasija de barro con su hacedor? ¿Discute el barro con el que le da forma, diciendo: ¡Alto, lo estás haciendo mal! ¿Acaso la vasija exclama: 'Qué torpe eres'?". Dios, nuestro Padre, es el alfarero y nosotros somos el barro. Es hora de abrazar a la persona maravillosa que Él quiso que fueras y el propósito para el que fuiste creado. Haz esta confesión: "Señor, tú eres mi alfarero y aquí estoy yo, tu terrón de arcilla; estoy dispuesto a ser lo que tú me hiciste ser, y haré lo que propusiste que yo hiciera".

Ps Mark Garver