16 de Septiembre, 2024 - Templanza para terminar
1 Corintios 9:25 “Y todo hombre que lucha por el dominio es templado en todas las cosas. Ahora bien, ellos lo hacen para obtener una corona corruptible; pero nosotros una incorruptible.”
Podemos ver de este versículo y el versículo anterior que el Apóstol Pablo nos estaba diciendo, por el Espíritu Santo, que si eres serio acerca de terminar tu curso, tienes que tener templanza en tu vida. Él lo compara con obtener un premio o corona por un evento atlético. Para nosotros, la nuestra es una corona eterna recibida en el Tribunal de Cristo. Pablo nos está diciendo, muy fuertemente, en los versos que siguen que él tiene que mantener su cuerpo en sumisión. En Romanos 12:1-2, Pablo nos dice que ofrezcamos nuestros cuerpos en sacrificio vivo al Señor; y en Romanos 8:13, nos dice que crucifiquemos nuestra carne para mantenerla en sumisión. Él está diciendo que el fruto de la templanza es necesario para mantener tu carne bajo control, para que puedas terminar tu curso asignado. Este fruto parece ser muy importante entre más alto quieras llegar en Dios, y entre más útil quieras llegar a ser para El. Tito 2:1-2 dice: «Pero tú habla lo que es sana doctrina; que los ancianos sean sobrios, serios, templados, sanos en la fe, en el amor y en la paciencia.» Junto con la fe y el amor, si vas a ser usado por Dios y perdurar, la templanza (autocontrol) debe ser parte de tu vida. La templanza debe ser desarrollada en nuestras vidas si vamos a mantener nuestra carne bajo y ser capaces de terminar nuestro curso con gozo.
Recuerda, la templanza (autocontrol) es refrenar las pasiones, apetitos y deseos de uno. Nunca hay indulgencia excesiva cuando caminas en templanza. Es bueno siempre mantener tu carne bajo control, nunca dejar que tenga la preeminencia en tu vida. El exceso en tu carne nunca es bueno, pero estar lleno de Dios es lo mejor. Me encanta Efesios 5:18; nos dice que nunca nos embriaguemos con vino natural, con alcohol, sino que estemos llenos del Espíritu. A través del nuevo nacimiento y caminando en el espíritu, podemos deshacernos de los excesos en cada área de nuestras vidas. Lo que tenemos que decidir, si vamos a terminar nuestro curso, es abrazar el fruto de la templanza, para no terminar al margen con nuestra fe naufragando, como Pablo advirtió por el Espíritu Santo. Debemos entender y tomar a pecho esta advertencia y ser templados en todas las cosas. La templanza sólo se refiere a la moderación cuando se trata de cosas buenas. La mayoría de las personas usan mal esta palabra y la aplican a todas las cosas porque templanza fue traducida como moderación en Filipenses 4:5, pero esta es una mala traducción. En ese versículo, debería haber sido traducido como bondad fraternal en lugar de moderación porque la moderación nunca se aplica al pecado. No está diciendo que el pecado con moderación está bien siempre y cuando no se apodere de ti. En este caso, la templanza es estar en control total sobre tu carne y mantenerla sumisa, para que no peques.
Pr. Mark Garver