27 de Julio, 2023 - Malas compañías
1 Corintios 15:33 (NASB-Nueva Biblia Estándar Americana). "No se dejen engañar: Las malas compañías corrompen las buenas costumbres".
Muchas veces, la gente usa esta escritura con sus hijos y especialmente con sus adolescentes, pero este es un versículo para todos. Todos podemos ser engañados. ¿De donde viene el engaño? Tiene tres fuentes: el diablo, otras personas (a veces influenciadas por el diablo), o auto-engaño. El Señor me dijo que el autoengaño es el más difícil de liberar. Las personas que se auto engañan creen que están en lo correcto. Como creen que están en lo correcto, eso significa que los demás deben estar equivocados. A veces, parece que ni Dios mismo puede llegar a ellos. Las amistades, a quienes permitimos que nos rodeen para hablar en nuestras vidas, parecen ser un área que a Dios le preocupa porque podemos ser engañados. La compañia que tú mantienes será la gente que tiene acceso a tu alma, a tu mente, voluntad y emociones. Ellos tienen entrada a lo que tu crees.
Tienen el poder de influenciarte. Te ayudan a tomar decisiones en tu vida. Así que, si son malas compañías, no significa necesariamente que sean malas personas. Puede ser que simplemente no crean como tú, o que no piensen como tú respecto a la Palabra de Dios o a las prioridades de Dios para tu vida. Si ellos resultan ser malos para ti, entonces de alguna manera te corromperán y erosionarán tu resolución y te alejarán de tu lugar en Dios. Si no han nacido de nuevo, podrían llevarte de nuevo al pecado. Tienes que tener cuidado con quien te juntas. No todos deben tener un lugar cercano en tu vida. A veces, dentro de una compañía de personas, hay un líder y cualquier cosa que el líder haga, todos los demás simplemente lo siguen. A menudo pienso en Pedro con esto, porque después de negar a Jesús y estar muy decepcionado consigo mismo y dispuesto a rendirse, dijo: "Voy a pescar". Entonces, todos los demás Apóstoles dijeron: "Iremos contigo". Jesús vino y enderezó a Pedro a través del amor, y todos recibieron el beneficio y encontraron su lugar en Dios, pero ¿Qué hubiera pasado si Pedro no se hubiera arrepentido y recibido el amor de Dios? Habría sido "mala compañía" y habría sido una mala influencia a los demás.
Una vez, alguien me dio una cinta de una reunión de mujeres y la oradora dijo algo que cambió mi vida. Ella dijo: "Dejen que los lastres se vayan". ¡Eso me gustó! En ese momento, no lo relacioné con esta escritura, pero es totalmente así. Si hay personas en nuestras vidas que nos están llevando en direcciones equivocadas, o siempre estamos agotados por ellos, o nos resulta más difícil servir a Dios cuando estamos cerca de ellos, debemos "Cortar los lastres de nuestra vida". En su mayor parte, nosotros controlamos a quién dejamos acercarse a nuestro alrededor, y no necesitamos a nadie que nos lleve por un camino equivocado o que nos chupe la vida. No te dejes engañar. Toma algunas decisiones sobre a quién dejas acercarse a tu alrededor.
Ps Mark Garver