01 de Enero, 2024 - Enfrentarse al Enemigo
1 Pedro 5:8 (RVA) Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar.
En cualquier tema suele haber dos zanjas. El tema al que me refiero hoy tiene que ver con tu adversario, el diablo. Algunas personas culpan al diablo de todo lo que sale mal y eso no es cierto. A veces tomamos malas decisiones y eso es lo que causa nuestros problemas. Por otro lado, hay algunos creyentes que ni siquiera reconocen que el enemigo es el que les causa problemas; y el problema con eso es que o terminan culpando a Dios por cosas que el diablo ha hecho o son tan naturales, que no reconocen nada de lo que sucede en el reino del espíritu.
La verdad es que los ataques espirituales vienen a todos. 1 Pedro 5:8 nos dice que debemos ser sobrios y vigilantes porque tenemos un enemigo, un adversario, que caza como un león, y está buscando a quien devorar. La versión Reina Valera dice: "A quién él [el diablo] pueda devorar". Eso significa que depende de nosotros si es capaz de devorarnos o no. Pero no nos equivoquemos, el diablo ataca a cualquiera y a todos los que puede. En Efesios 6:10-11, se nos dice que seamos fuertes en el Señor y que nos pongamos nuestro uniforme de combate, para que podamos hacer frente a las asechanzas del diablo. Ser sorprendidos sin nuestro uniforme puesto en el espíritu hará que seamos derrotados por nuestro adversario. La Palabra de Dios también advierte de las armas del diablo que están formadas contra nosotros y que no prosperaran (Isaias 54:17). Entonces, sabemos que el diablo viene, caza como un león, y tenemos que ponernos nuestra ropa de batalla, porque está formando armas. Esto podría ser abrumador si no nos damos cuenta de que somos capaces de resistir y ganar en cualquier conflicto que tengamos con el diablo o cualquier circunstancia que él utiliza para tratar de derrotarnos.
Se nos han dado armas que ganan. Lo primero que debes hacer es tener una revelación del nombre de Jesús. Usa ese nombre contra todo lo que venga. Es un nombre ante el cual todo tiene que inclinarse. Santiago 4:7 nos dice que nos sometamos a Dios y resistamos al diablo, eso significa que puedes resistir al diablo. Se nos dice en 1 Pedro 5:9 que resistamos al diablo firmes en la fe. Así como el Señor le dijo al Apóstol Pablo, "Mi gracia es suficiente," la gracia permanente de Dios también es suficiente para ti. Tu tienes el poder de Dios para resistir cualquier cosa que el diablo esté haciendo. No es por gracia que se supone que simplemente lo tomemos; es por gracia que se supone que resistamos lo que el diablo está haciendo. Gracias a Dios que el Señor no dijo que solo lo tomemos y pronto todo terminara. Él nos dio armas. Usa tu escudo de fe para apagar todos los dardos de fuego que el diablo envía hacia tu mente. Toma la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios, y ahuyenta al diablo y sus circunstancias de tu vida.
Tú y yo debemos decidirnos a que cuando el diablo venga, nos pondremos de pie, tomaremos nuestras armas y venceremos. Dios siempre nos hace triunfar en Cristo Jesús. Venceremos por la sangre del Cordero y la palabra de nuestro testimonio. Seamos como el apóstol Pablo y declaremos con valentía: "Nada de esto me conmueve" (Hechos 20:24). Tú eres más que un vencedor, y tienes la victoria. El diablo es un enemigo derrotado, y tú siempre ganarás con la Palabra de Dios en tu corazón y en tu boca.
Ps Mark Garver